He prometido en la última entrada que escribiría más a menudo. Domingo por la mañana, y en eso estoy, aún con los ojillos medio cerrados, mientras escucho clásicos de Sinatra & Co. Y también un poco de Jacques Brel. Que últimamente y gracias a (o por culpa de) mi último objeto de deseo, me ha dado por todo lo francés. Éste no es otro que mi adorado Jean Dujardin. Puedo decir que casi me he hecho una experta en cine francés, tras haberme visionado toda, o casi, su filmografía. Tengo que decir que ha hecho DE TODO, siempre con mucho talento por su parte, aunque no siempre en cuanto a la peli en general. Que algunas siguen siendo 'muy francesas', es decir, un pelín chapa ( con todo el cariño, jeje ). Sin embargo, hay varias que son buenas y muy interesantes, y otras muy divertidas. Ya he dicho que él está fantástico en todas, y que tiene tantos registros como papeles? Camaleónico como De Niro en sus mejores tiempos.
Ahora mismo los cines proyectan su último divertimento e ida de olla, 'Los infieles'. Algo así como un collage sobre los hombres y la infidelidad. Concepto interesante y atrevido en su ejecución. A mí me ha parecido divertida y fresca. Y no me quejo nada de la escasez de ropa de Jean en la peli. Ups. He escrito eso en alto? ;)
Aquí un trailer de una peli muy recomendable. Francesa y de Jean. Estoy insoportable, lo sé. Ya lo advertía en post anteriores.
No puedo creer que esté escribiendo esto. Cuando se anunció que ésta sería la última temporada, me pareció una buena noticia, teniendo en cuenta que la calidad, tanto de algunos personajes ('Zorranika', p.e.), como de algunos guiones, ha disminuído mucho. Pero ahora que ha llegado el momento de la verdad, me duele más de lo que me gustaría admitir. Me duele porque es el fin de una era. Me duele porque es el final de una serie que ha marcado unos años muy especiales de mi vida. Me duele porque es la serie que permitió al mundo apreciar a Hugh Laurie de la forma en que se merece. Me duele porque desde el principio es una serie transgresora, con un protagonista poco convencional. Me duele porque nos regaló algunos de los minutos más brillantes de la pequeña pantalla. Me duele porque voy a echar de menos mi 'cita' cuasi semanal con Hugh. Me duele porque sé que su vida, la de Hugh, va a cambiar radicalmente, y me duele porque tengo miedo de perderle la pista. Menos mal que sus inquietudes son tan amplias como sus talentos, y seguro le veremos pronto en sus siguiente trabajo. Para empezar ya tiene en marcha la segunda gira de 'Let Them Talk', de alcance mundial y con una lista interminable de lugares y fechas.
De momento, yo ya tengo entradas para uno de sus conciertos en Julio. Y ya me estoy planteando perseguirle por media gira. Que no se piense que se me va a escapar tan fácilmente.
Hoy me dormiré abrazada a mi almohada llorando desconsoladamente.
